3.Pensamientos

Le daba una vuelta con el brazo pero el supo hacer que fuera eso en mi contra y dejándome abajo suya en el suelo cara a cara. Sentí como mi cara se había vuelto un tono rojizo leve.
-¡Quítate de encima!-grite mientras le daba una patada y lo alzaba
-Vaya, si que eres fuerte me gusta, vamos linda para la próxima debes ser mejor si me quieres atrapar-dijo el asesino mientras escalaba por el muro y desaparecía junto con la noche
Me quedé con la misma posición un poco avergonzada, estupefacta e impresionada nunca había conocido a alguien que pudiera hacer eso a parte de Bianca, Enrique y yo. Al parecer esta misión iba a hacer algo más difícil de lo que esperaba. Suspiré un momento y saqué el celular de mi traje.
-Bianca, ¿cómo te fue?-pregunté
-Mmm... este chico me tocó más difícil y se me escapó-decía Bianca con un tono frustrado-¿Y a ti?
-Bueno, digamos que me tocó lo mismo, reunámonos en el parque central-decía mientras colgaba
Me dirigí hacia el parque mientras aún iba perdida en mis pensamientos, esos ojos grises los había visto tan cerca, su mirada no era como la de un asesino era algo compadecida y parecía como si realmente no quisiera estar ahí, eso si mantenía un humor bastante "cómico" para un asesino y una actitud relajada como si no le tomara mayor importancia. Cuándo me di cuenta ya había atravesado toda la ciudad y ya había llegado al parque central, ahí me estaban esperando Enrique y Bianca.
-Como siempre tarde-decía nuevamente Bianca
-Jeje...perdón-decía un poco avergonzada
-¿Cómo les fue a ustedes?-preguntó Enrique
-A mi el asesino de 23 tiene un humorcito que vaya da miedo además que es serio, todavía no averiguo su nombre pero vaya que es bueno con las artes marciales, es rápido y es peligroso me llegó a cortar un poco el brazo pero nada grave-decía Bianca
-Pues el de 22 tiene humor, su actitud es relajada y es un coqueto eso si es demasiado peligroso, ágil e igual rápido, por suerte no me pasó nada más que un dolor muscular-respondí quejándome 
-El de 21 si que es todo un reto estaba perfectamente armado y vaya que sabe disparar con las armas, su humor es normal ni serio ni divertido-decía serio Enrique
-Bueno ya saben lo que dice el jefe mientras mejor sepamos cómo es su carácter mejor sabremos como atacarlos-decía Bianca
Enrique, Bianca y yo nos dirigimos nuevamente a la oficina del jefe cada uno explicó lo que pasó, yo dije lo que pasó pero obviamente eliminé algunos detalles. Damian solo se nos quedaba viendo con cara de impresión y seriedad
-Vaya, son más fuertes de lo que pensábamos-decía serio Damian
-Sí, a partir de ahora debemos de estar mejor preparados-comenté relajada en el sofá
-Samantha, por un momento de tu vida, ¿no puedes ser seria?-preguntó Bianca
Simplemente le dediqué una sonrisa y volví a mis pensamientos, tratando de analizar cada movimiento que él había dado para poder comprender como eran sus tácticas pero simplemente no podría decifrarlo
-Entonces, a la siguiente agentes necesito que sean el doble de listos y rápidos que ellos, ¿eso no es lo que quieres Samantha?-preguntó Damian
-¿Eh? o si claro-respondí sin entender muy bien que me había preguntado
Salimos los tres de aquel despacho, Enrique dijo que iba a tratar de buscar sus nombres para saber si podía tener alguna pista, Bianca y yo nos salimos del edificio y nos quedamos enfrente de este. El ambiente era frustante no se podía estar ahí un momento más, normalmente cualquiera de las dos ya hubiera comenzado una charla cualquiera como el que íbamos a hacer hoy, que cosas debíamos de comprar, cosas así pero nada. Finalmente decidí romper el hielo.
-Bien Bianca por tu actitud supongo que te paso algo con él y no me mientas porque te conozco bien-le dije tratando de buscar una conversación
-No nada de el otro mundo, solo estoy un poco herida y sin energías es todo-decía Bianca mientras miraba al cielo, de ahí cambió su dirección y me miró pícaramente-Pero claro se que a ti te fue mejor
-¿Eh? de que hablas solo luchamos-dije con un leve sonrojo mientras trataba de ocultar mi cara
-¿Entonces por qué tan roja?-preguntó Bianca con tono pícaro
-Por nada, solo ese asesino es  un estorbo y coqueto-respondí enoja
-¿Coqueto?-preguntó Bianca curiosa-Parece que alguna de las dos se divirtió con su asesino y el asesino con la agente
-¡Claro que no!-dije a la defensiva-solo que el trataba de coquetearme nada más
-Con razón ese carácter-dijo juguetona
-Ya tenemos que irnos de aquí que se hizo de noche-dije finalmente
Las dos agarramos nuestras cosas y nos despedimos ella se iba a la dirección contraria. Como la noche estaba tranquila y hacía buen ambiente en vez de pedir un taxi me fui caminando. Nuevamente me sumergí en mis pensamientos, pensé en mi hermano Sergio, que estaría haciendo o como se sentiría, según mis cálculos él aproximadamente tendría 16 años todo un joven, pero realmente seguía preocupada por él ya que no sabía en que clases de situaciones estaría, incluso llegué a imaginar el peor de los casos su muerte... Las lágrimas se escurrieron sobre mi cara sentía como la vista se me nublaba y el humedecer de mi rostro, sentía nuevamente la pesada culpa que día con día tenía, a lo mejor si el día que se lo llevaron podría haberlo rescatado, no eso hubiera sido igualmente estúpido ya que ninguno de los dos hubiese tenido oportunidad alguna, llegué cuando menos me lo esperaba a mi casa y solo me dejé caer en el sofá de estilo vintage en la sala pintada de un verde olivo
-Te encontraré-murmuré mientras caía en un pesado sueño Tweet

2-¿Comenzamos?

Han pasado 4 años desde lo sucedido, no he vuelto a saber sobre mi hermano menor pero se que sigue con vida, mi pregunta es ¿dónde?, ya que la guerra ha acabado ya no corremos riesgo, me uní a la profesión de policía especial aunque me quite un poco de tiempo para continuar con la búsqueda de mi hermano al menos tengo pistas. La primera sigue vivo y la segunda la tiene un empresario rico me haría el trabajo aún más difícil.
-Agente González, tenemos una nueva misión para usted últimamente se han dado casos de secuestros parecidos a los de su hermanos, le asignamos esta misión porque se relaciona con su hermano y a lo mejor así podría obtener al menos una pista-decía mi jefe sentado sobre su sillón de cuero negro que estaba colocado detrás de la mesa de caoba
-Sabe que no me gusta que me digan González ¿verdad? además soy tu amiga Damián, no hace falta tanto formalismo-decía relajada en la silla
-Samantha te he dicho que ese es mi deber-contestó Damián
-Sí, si volviendo al tema del caso ¿que más sabe al respecto?-pregunté
-Por lo que sabemos el historial de este secuestrador coincide con el perfil del secuestrador de tu hermano así que a lo mejor si averiguaras más podría venirte bien-respondió mi jefe
-Ya veo...¿qué mas sabes?-pregunté nuevamente
-También por lo que se sabe cuenta con 3 secuaces o asesinos como los quieras llamar, casualmente son los más buscados por nosotros así que matarías a dos pájaros de un tiro-contestó Damián
-Interesante, suena divertido, ¿cuándo empiezo?-volví a preguntar
-Hoy mismo, suerte Samantha-respondió Damián
Me levanté de la silla, agarré mis armas y me puse mi uniforme de agente especial, cuándo iba saliendo mi jefe me llamó nuevamente
-Agente González, se me había pasado por completo tienes unos compañeros para ser exactos dos a Enrique y a Bianca-decía mi jefe sonriente
-Oh...aquí vamos de nuevo-murmuré
Cuando salí Enrique y Bianca ya estaban esperando por mi, los dos estaban sentados y hablando sobre quienes eran o como actuaban
-Tardaste...como siempre-decía Bianca con cierto tono bromista
-Jeje, que quieres que te diga estaba ocupada-me defendí
-Vamos chicas, no hay tiempo que perder debemos encontrarlos-decía Enrique
Los tres bajamos a el estacionamiento, agarramos el coche negro nuestro favorito y de inmediato salimos de ahí, todo se volvió un silencio incómodo y decidí que era momento de cortar el hielo
-Bueno, ¿que sabemos de los asesinos?-pregunté
-Lo que sabemos de momento es que los tres son chicos, el más pequeño de edad tiene 22 es un genio con las armas, el de en medio tiene 23 y es especialista en la lucha cuerpo a cuerpo, es el más listo y fuerte de los tres por tanto es el líder y el más peligros y por último pero menos importante el mayor tiene 23 el domina las artes-decía seriamente Bianca
-Es todo un reto, hay que tener cuidado los tres son iguales de peligrosos, el jefe nos destinó uno a cada uno a mi me toca el menor, a Bianca el mayor y a ti Samantha a ti te tocó al lider-decía Enrique mientras conducía
-Esperen un minuto...el jefe nunca decide quien le toca a cada quien-decía un poco confundida-¿¡Lo hicieron por votación!?
-Para que no te apuras-decía Bianca con un tono divertido
-¡Juro que me las pagarán!-me iba quejando
Pasábamos por varios túneles, callejones y calles todo casualmente ese día estaba que no podía caber ni una aguja más, así que decidimos que cada uno se separara y buscara de una vez a los asesinos para acabar rápido, baje del coche y empecé a caminar a la dirección que me habían dado. Era una feria todo estaba lleno de color los niños corrían de un lado a otro suplicando a sus padres que los subieran a otro juego más o que les compraran otro algodón de azúcar, los adolescentes entraban y salían del tunel del amor obviamente para besarse y los adultos solo se subían a los más lentos como la rueda de la fortuna. Hasta que recapacité y me paré a pensar un segundo no tenía ni la menor idea de como era al asesino que buscaba, saqué mi celular y llamé a Enrique
-¿No sabes como es verdad?-preguntó al momento que contestó
-No...-respondí
-El es alto de aproximadamente 1.75, ojos grises, cabello negro, normalmente lleva unas gafas en su camisa, jeans azules y zapatos rojos-continuó Enrique
-Gracias, será pan comido-decía mientras colgaba el celular
Llevaba unas cuantas horas buscándolo, decidí subir a la rueda de la fortuna para ver si podía encontrarlo más fácil entre la multitud, esperé en la fila y al fin me subieron a un asiento, veía de un lado a otro haber si podía encontrarlo pero nada, cuando la rueda de la fortuna estaba en lo más alto curiosamente lo vi estaba abajo de mi. Cuando paro el juego inmediatamente vi que se iba y yo corrí para alcanzarlo. Giró en un callejón, apenas se podía ver solo alumbraba la luna. Se paró en frente del muro y rápidamente me escondí.
-Sal de ahí, no creas que no he notado tu presencia-dijo aquel chico que seguía volteado de espaldas
Salí ya con el arma cargada lista para apuntarle si se oponía a algo.
-Agente González, quedas arrestado bajo el nombre de la ley-decía mientras seguía con el arma apuntándole
-Muy bien agente veo que me ha atrapado-decía mientras se volteaba y venía hacia mi
-Las manos arriba-decía mientras seguía en guardia
Se vino acercando tal y como lo dije y cuando saqué las esposas me distraje un momento ya que no las encontraba, mientras lo hacía el ya había aprovechado para quitarme el arma
-Esto no es para las niñas como tú-decía mientras jugaba con el arma y luego lo lanzó hacia atrás divertidamente
-¡No soy una niña! creo que soy lo suficientemente grande para usar una-decía defendiéndome
-Oh si...si eso ya lo veo-decía mientras me veía pícara mente
En eso noté como me había logrado incomodar, así que empecé a darle algún que otro golpe
-A parte de linda te sabes defender bien-decía mientras agarraba mi pie en el aire
Le daba una vuelta con el brazo pero el supo hacer que fuera eso en mi contra y dejándome abajo suya en el suelo cara a cara


Fin del capítulo:
¡Sigo aquí en blogguer! Me desaparecí un buen tiempo (demasiado) seguramente me odiarán T.T La principal razón es porque no tenía inspiración y no sabía como continuar, he escrito al rededor de 10 capítulos de solamente el 2º pero este fue el que más me convenció. Ahora estoy tratando de actualizarme en todos sus hermosos blogs algunos comentaré hoy o mañana depende de el tiempo. ¡Gracias por esperarme tanto tiempo! y espero que este capítulo haya sido de su agrado (: Tweet